Una cierta manera de manta, propiamente «alhamar». Dicha, en terminación arábiga, hameretun, que vale manta colorada, porque de ordinario tienen esta color los alfamares. Y díjose del verbo hamere, que significa ser colorado. Esto dice Diego de Urrea.

Vale río bermejo o colorado. Y un rey de Granada se llamó Alhamar, que quiere decir el colorado. Este rey Alhamar, que en lugar de Abenhud fue nombrado por rey de Arjona, teniendo noticia que los soldados que estaban de guarnición en el castillo de Martos, habían salido a robar con su capitán Alonso de Meneses, a quien don Álvaro de Castro había dejado en él, le puso cerco; pero estando dentro la mujer del dicho don Álvaro, cerró las puertas e hizo armar todas sus mujeres y criadas, y que de los adarves tirasen piedras contra los moros, dando muestra de ser soldados, con que se entretuvo hasta que el dicho Meneses y sus compañeros, siendo avisados del peligro, acudieron y Alhamar alzó el cerco. Esto fue cerca de los años de mil y doscientos y treinta y nueve. De manera que el río Alhamar tomó nombre deste rey moro o de las arenas de su ribera, por ser rojas.